Charlie Hebdo Nº 1709. Autores: Jean-Loup
Adénor, Gérard Biard, Biche, Jean-Yves Camus, Coco, P. Chesnet, Laure Daussy, Yann
Diener, Felix, Antonio Fischetti, Foolz, Zoé Gachen, Yannick Haenel, Peter
Kuper, Edgar Lalande, Philippe Lançon, Luce Lapin, Fabrice Nicolino, Lorraine
Redaud, Riss, Salch, Schvartz, Udine y Philippe Vuillemin, entre otros. Portadista:
Salch. Director: Riss. Les éditions Rotative. Francia, 23 de abril de 2025.
Era sabido de antemano. La revista satírica francesa
Charlie Hebdo no comulga con ningún credo. Sus autores podrán profesar la
religión que quieran, pero la publicación sigue enarbolando su mirada cáustica,
crítica y políticamente incorrecta sobre todo y sobre todos. Y la muerte del
Papa Francisco no será el hecho histórico que les haga cambiar de posición.
Desde el editorial, Riss se encarga de
recordar (y agradecer) el apoyo que el Papa les brindó después del brutal
atentado de 2015, anotando enseguida que siempre consideraron a Francisco un hombre
sumamente inteligente, diplomático y maquiavélico, traductor de viejas ideas en
bellas palabras. Un ilusionista, defensor de migrantes y concientizador del
cambio climático, capaz de castigar a los curas pedófilos franceses pero
incapaz de recibir a sus víctimas. El conservador más reformista y el
reformista más conservador que podía exhibir la Iglesia Católica.
Por estos mismos motivos que critica, Charlie
Hebdo lamenta la partida de Francisco. Porque intuye (sabe) que lo que viene
será, indefectiblemente, peor. Mucho peor. Para la publicación, el próximo Papa
estará sintonizado con el mundo real. O sea que el sucesor de Francisco será, básicamente,
un reaccionario de mierda. Un tipo misógino y homófobo, un ultraconservador
aferrado a los dogmas más arcaicos que se puedan imaginar. Un moralista charlatán,
célibe y mentiroso de profesión. Un populista religioso de extrema derecha, seleccionado por J.D. Vance, vicepresidente de los EE.UU., para mantener los privilegios de
las élites y derruir los derechos de los trabajadores y las minorías. Una rata,
tal como lo muestran en la portada del ejemplar que acaba de llegar a los
kioscos. Si llegan a tener razón, cómo (y cuánto) se lo va a extrañar a Francisco.
Fernando Ariel García